Extrañando a las amigotas
Las extraño.
Aún no me voy. Aún no empiezan nuestras fiestas y yo ya las extraño a morir!!
Esta gira me deja una espina en el estómago. Hace demasiados años que no paso un 18 de Septiembre lejos de ustedes pero hay cosas que se viven una sola vez en la vida y como ya debieran saber...no me las quiero perder.
No importa dónde esté, no importa la excelencia de la comida, o de las fiestas o la gente formidable que pueda conocer, nada... absolutamente nada se compara a nuestros días patrios juntas.
¡¡Las quiero y las odio a morir!! Así como las querré y las odiaré el 17 de Septiembre a las 23.59 hrs. cuando recuerde que junto a ustedes gritaría "Por los próceres de la Patriaaaaaa....¡¡Salud!!"... "Hagámos un salud por cada año de Independencia!!...¿Cuántos son?"
O cuando sean las 3 de la mañana de la misma noche y sepa que no estoy junto a ustedes bailando entre el barro, el aserrín y los litros de vino y ponche que ya cubren la totalidad de la Fonda Oficial, ni cuando después de intentar durante un año completo enseñar al menos una noción de pasos de cueca sin ningún tipo de éxito, lleguen esa misma noche con su bufanda en la mano para decirme: "Ya, ahora sí... enséñame a bailar cueca" y yo las mire con cara de "típico de ustedes...!!! " y entre indicación de 'uelta y media 'uelta termine bailando con el animador de la Fonda que ya no puede ni modular por el micrófono.
También las odiaré profundamente cuando sepa que están en algún asadito en el pueblo, o cuando en la tardecita vayan a saludar al "partner" porque está de cumple y las muy patúas tengan que bajar con lentes de sol para disimular los ojos de trucha cuando se devuelvan a la casa. Las odiaré porque no estoy con ustedes, las odiaré porque cuando vean una puesta de sol, yo veré esa misma pelota amarilla desaparecer por la cordillera. Las odiaré y tendré que contenerme al máximo para no aburrir a mis compañeros de viaje con nuestras inigualables historias y con lo maravillosas que somos juntas.
Las odiaré si llueve porque no estaré ahí para correr a la playa mientras nos empapamos bajo la lluvia, porque no estaré ahí para saltar las pozas, ni llegaré mojada hasta los calzones porque encontré que la lluvia estaba taaaaaan exquisita.
Las odiaré desde el 14 hasta el 19 incluído porque ese día no estaré a su lado para que me alcancen la botella de 2 litros de agua porque por alguna extraña razón muero de sed. Las odiaré y cada vez que las odie, brindaré por cada una de ustedes, por nosotras juntas y por la amistad que hemos cultivado... Y si por alguna razón, en ese momento no tengo una copa de vino en la mano (copa la patúa, si hasta el año pasado aún tomaba de la chuica), no importa, porque cerraré por un segundo los ojos y me sentirán justamente a su lado diciendo nuevamente...¡Salud!
Aún no me voy. Aún no empiezan nuestras fiestas y yo ya las extraño a morir!!
Esta gira me deja una espina en el estómago. Hace demasiados años que no paso un 18 de Septiembre lejos de ustedes pero hay cosas que se viven una sola vez en la vida y como ya debieran saber...no me las quiero perder.
No importa dónde esté, no importa la excelencia de la comida, o de las fiestas o la gente formidable que pueda conocer, nada... absolutamente nada se compara a nuestros días patrios juntas.
¡¡Las quiero y las odio a morir!! Así como las querré y las odiaré el 17 de Septiembre a las 23.59 hrs. cuando recuerde que junto a ustedes gritaría "Por los próceres de la Patriaaaaaa....¡¡Salud!!"... "Hagámos un salud por cada año de Independencia!!...¿Cuántos son?"
O cuando sean las 3 de la mañana de la misma noche y sepa que no estoy junto a ustedes bailando entre el barro, el aserrín y los litros de vino y ponche que ya cubren la totalidad de la Fonda Oficial, ni cuando después de intentar durante un año completo enseñar al menos una noción de pasos de cueca sin ningún tipo de éxito, lleguen esa misma noche con su bufanda en la mano para decirme: "Ya, ahora sí... enséñame a bailar cueca" y yo las mire con cara de "típico de ustedes...!!! " y entre indicación de 'uelta y media 'uelta termine bailando con el animador de la Fonda que ya no puede ni modular por el micrófono.
También las odiaré profundamente cuando sepa que están en algún asadito en el pueblo, o cuando en la tardecita vayan a saludar al "partner" porque está de cumple y las muy patúas tengan que bajar con lentes de sol para disimular los ojos de trucha cuando se devuelvan a la casa. Las odiaré porque no estoy con ustedes, las odiaré porque cuando vean una puesta de sol, yo veré esa misma pelota amarilla desaparecer por la cordillera. Las odiaré y tendré que contenerme al máximo para no aburrir a mis compañeros de viaje con nuestras inigualables historias y con lo maravillosas que somos juntas.
Las odiaré si llueve porque no estaré ahí para correr a la playa mientras nos empapamos bajo la lluvia, porque no estaré ahí para saltar las pozas, ni llegaré mojada hasta los calzones porque encontré que la lluvia estaba taaaaaan exquisita.
Las odiaré desde el 14 hasta el 19 incluído porque ese día no estaré a su lado para que me alcancen la botella de 2 litros de agua porque por alguna extraña razón muero de sed. Las odiaré y cada vez que las odie, brindaré por cada una de ustedes, por nosotras juntas y por la amistad que hemos cultivado... Y si por alguna razón, en ese momento no tengo una copa de vino en la mano (copa la patúa, si hasta el año pasado aún tomaba de la chuica), no importa, porque cerraré por un segundo los ojos y me sentirán justamente a su lado diciendo nuevamente...¡Salud!
Amigotas de alma ... ¡¡Por lo menos espérenme con par de 'empanás' y un poco de energía y harta chicha para el 21!! Y durante las fiestas, cuando se acuerden de mí...porque más vale que se acuerden las desgraciadas... mínimo que griten un "Viva la Ale...mierda".
Ahora si quieren gritar un Viva Chile yo no me meto pero después me cuentan...ya?
Ahora si quieren gritar un Viva Chile yo no me meto pero después me cuentan...ya?
Etiquetas: amigas, fiestas patrias, septiembre